11 cosas que deberías tener en cuenta sobre el transporte masivo urbano
En Lima y el Perú en general
1. Hasta principios de los 90s los peruanos teníamos una empresa pública de transporte urbano, con buses grandes -muchos de ellos articulados (conocidos como "Íkaros"). El primer gobierno aprista la hizo colapsar como lo hizo con toda empresa pública y luego el dictador Alberto Fujimori, como parte de su actuar neoliberal de despojarnos de todo lo que nos pertenecía a todos los peruanos, la liquidó.
2. Durante la dictadura fujimorista se "liberalizó" el transporte urbano de pasajeros. Se permitió el ingreso de vehículos inapropiados para ello, como las "combis" y "cústers". El número de líneas se incrementó, comenzando la terrible superposición de rutas.
3. En Lima, el alcalde Alberto Andrade quiso poner orden, eliminando al menos las rutas aprobadas por la muncipalidad provincial de Huarochirí (¡sí, rutas en Lima autorizadas en otra provincia!). El corrupto poder judicial no lo permitió.
4. El alcalde antes mencionado realizó los estudios para implementar un sistema de transporte del tipo BRT(Bus Rapid Transit o Tránsito Veloz de Buses) como el que existía en Curitiba(Rede Intregada de Transporte) y en Bogotá (Transmilenio). En 2002 en debate televisado en el marco de las elecciones municipales, Andrade le presentó el expediente técnico a Luis Castañeda. Éste dijo que no servía y que iba a construir una línea de metro. Como sabemos, Castañeda ganó y no hizo el metro.
5. La Línea 1 del Metro de Lima (lo que mal conocen los limeños como "tren eléctrico") fue concluída por el gobierno central, con sobrevaluaciones de por medio y 25 años después de iniciado, con deficiencias y corrupciones (característica de los gobiernos apristas), pero nada tuvo que ver Castañeda con ello (ver punto anterior).
6. Luego de 1 periodo de 4 años sin haber solucionado el problema del transporte urbano y ni haber si quiera planteado cambios significativos en la ciudad, Castañeda fue reelegido. En su segundo periodo desenpolvó el proyecto del Limabus, le cambió de nombre a "Metropolitano" y lo entregó en concesión. Fueron 3 años de lenta construcción (con el respectivo caos en la ciudad por todo ese tiempo) y triplicando el valor inicialmente estimado. Llegado el 2010, dado el tiempo transcurrido y el poco avance del proyecto, tuvo que recortarlo tanto por sur como por norte. Por cierto, el Limabus tenía contemplado un ramal hacia San Juan de Lurigancho.
7. En otros países las estaciones de BRT son más pequeñas, es decir, no crean un impacto tan alto en el paisaje urbano como las del Metropolitano, pero esto debido a que hay mayor fluidez.
8. El mal diseño y/o mala implementación del Metropolitano ha creado cuellos de botella en varios puntos de la ciudad. Por ejemplo en Chorrillos, en la av. Prolongación Paseo de la República se ha disminuido los carriles de 8 a 6 pero además la existencia de la enorme estación Matellini hace que en esta zona el número de carriles llegue a 4 (2 en cada sentido), produciendo una gran caudal de vehículos tratando de pasar por un tramo de vía tan estrecho y a la vez derivando parte del tránsito por la av. Defensores del Morro (ex Huaylas). Situación similar ocurre para salir de Chorrillos hacia Barranco, donde los vehículos de transporte de pasajeros pasan por lo que antes era la pista auxiliar. En Barranco, la situación es super caótica los viernes y sábado por la noche por la misma razón sumada al excesivo uso de taxis.
9. El costo del pasaje en el BRT de México D.F. (Metrobús) y el Estado de México(Mexibús) es de 5 pesos (aprox. S/. 1.20). En Guayaquil y Quito en sistemas similares es de 25 centavos de dólar (S/. 0.75). En Lima los concesionarios cobran S/2.50. porque el contrato firmado por Castañeda se lo permite. Al tratarse de empresas con fines de lucro que operan un monopolio (sin competencia) aprovechan esta situación para obtener la máxima rentabilidad de su inversión (la cual seguramente ya la recuperaron hace tiempo), a costa de nuestros bolsillos, pero también a costa de nuestra comodidad y tiempo, al poner insuficiente número de buses en operación.
10. La Reforma del Transporte prometida por la señora Villarán nos ilusionó a muchos, pero lamentablemente solo implementó a medias una de las rutas (no hay alimentadores). Es tarea del sucesor completarla y corregirla (alargar el recorrido del corredor de la av. Arequipa y cuadruplicar la frecuencia de buses, además de eliminar totalmente otros vehículos de transporte de pasajeros de la ruta, por ejemplo). ¡Exijámoslo!
11. Hasta hace poco Lima como capital solo era superada en caos en el transporte urbano de pasajeros por La Paz (Bolivia), pero el año pasado esta ciudad inició su propia reforma del transporte, introduciendo los buses Puma Katari, operados por el gobierno municipal.
Para concluir, es necesario indicar que la mejora del transporte masivo no solo es tarea de las autoridades. Los transportistas deben ser conscientes de que detenerse en un paradero más de 1 minuto tratando de hacer subir pasajeros no solo es una total falta de respeto, sino que además es algo ilógico, porque el número de pasajeros que ganan en una de esas paradas lo pierden en el siguiente paradero al que no llegaron a tiempo y que más bien son los buses veloces (los que no paran en medio de las cuadras ni se detienen por mucho tiempo en los paraderos) los que son preferidos y esperados por los usuarios. Así mismo, los vehículos de transporte masivo son afectados en su fluidez por la presencia de un excesivo número de autos ("particulares" y taxis) en las pistas.